Iannis Xenakis (Romania 1922 – França 2001)

Educat en el camp de l’enginyeria i la matemàtica, en un primer moment va treballar com a ajudant del famós arquitecte suís-francès Le Corbusier i va passar a interessar-se per acoblar certs tipus de càlculs matemàtics a dissenys visuals per als seus projectes arquitectònics. Xenakis va rebre educació musical durant la seva joventut i el 1950 va reprendre els seus estudis musicals de la mà de Mesiaen. Atret per les fortes analogies existents entre la música i l’arquitectura, a les quals va veure com realitzacions concretes de càlculs matemàtics abstractes, Xenakis va començar a interessar-se  cada vegada més per les qüestions d’estructura musical. El seu disseny  per al pavelló Philips va ser de fet una realització alternativa, en un medi diferent, d’unes idees que va  desenvolupar primer per una composició orquestral, Metastasis (1954). Un punt de contacte immediatament evident entre les dues obres, l’arquitectònica i la musical, es pot veure en les línies disposades de forma contínua, que flueixen d’una forma lineal de l’edifici i els glisandos convergents i divergents de la música.

/

Iannis Xenakis  ( Rumania 1922 – Francia 2001)

Educado en el campo de la ingeniería  y la matemática, en un primer momento trabajó como ayudante del famoso arquitecto suizo-francés Le Corbusier y pasó a interesarse por acoplar ciertos tipos de cálculos matemáticos a diseños visuales para sus proyectos arquitectónicos.

Xenakis recibió educación musical durante su juventud y en 1950 retomó sus estudios musicales de la mano de Mesiaen.  Atraído por las fuertes analogías existentes entre la música y la arquitectura, a las que vio como realizaciones concretas de cálculos matemáticos abstractos, Xenakis comenzó a interesarse cada vez más por las cuestiones de estructura musical. Su diseño para el pabellón Philips fue de hecho una realización alternativa, en un medio diferente, de unas ideas que desarrolló primero para una composición orquestal, Metastasis (1954). Un punto de contacto inmediatamente evidente entre las dos obras, la arquitectónica y la musical, puede verse en las líneas dispuestas de forma continua, que fluyen de una forma lineal del edificio y los glisandos convergentes y divergentes de la música.